Progr.11-VII-19

Progr. 11-VIII-19  Audio completo en

https://www.ivoox.com/39749035

Lo escrito, en:

www.arribando.com.ar

Documental “Sobre el agua”, en:

https://youtu.be/vy_phBhnza0

 

Medioambiente infantil y cultural: Día del niño – Lenguaje inclusivo – Medioambiente urbano: Cos, recaudación, injusticia y libertinaje.

Zargazos, contaminación, humedales, ríos. Diálogo con Dr. Juan José Neiff.

El domingo 18 es el día del niño. Les pedimos, a los padres, que si regalan

relacionado con un deporte, que elijan un deporte integral; formador de la nobleza, el respeto y la igualdad. Si es posible, en contacto con la naturaleza. El deporte es un juego con iguales y matar, o herir, seres inofensivos e indefensos, que  no eligieron jugar, no es un deporte, ni un juego.

Transmitir ejemplos que dañen a un ser vivo, siempre es malo para un niño.

– – – –   En la apertura del Congreso de la lengua española, realizado en Córdoba, la escritora Claudia Piñeiro, expresó: “Este congreso debería llamarse Congreso de la Lengua Hispanoamericana”, y, en una entrevista que le hicieron a Joaquín Sabina, un poeta, lúcido y popular, dijo: “La lengua une”. Y, seguramente, ese debe ser el logro máximo de un lenguaje: la comunicación.

El español es el segundo idioma más hablado del mundo, después del chino.

Esa es nuestra gran posibilidad macro inclusiva a partir de nuestro idioma, y esa es nuestra prédica, desde hace años, cuando escuchamos a gran parte del pueblo, y a los medios de comunicación, utilizar palabras inexistentes en la lengua española.

Hoy, Ciencias sociales de la UBA, en un falso concepto vanguardista, acepta esta modalidad, y pregona que este criterio enriquece el idioma, a pesar de la no aceptación a nivel internacional. Paralelamente, la Real Academia Española, sin preocuparse demasiado, en lugar de preservar el leguaje genuino, incorpora todos los términos utilizados popularmente, en países subdesarrollados, los acepta, sin más, y los rotula como argentinismos, en nuestro caso. En un mundo globalizado, la lengua se está restringiendo a un país.

Seguramente, cada vez van a ser más, y, tal vez se logre generar un lenguaje argentino y propio, porque los argentinos somos inteligentes, y más vivos que todos. Unimos las palabras fundamentales del principio: “lengua hispanoamericana – la lengua une”, y pensamos ¿Qué va a pasar con nosotros, cuando, realmente, querramos incluirnos, y comunicarnos, con el mundo hispano parlante, hablando el idioma inclusivo propio que inventamos?

– – – – -Y, esta vez, tocó sufrir en carne propia el tránsito por el medioambiente urbano. La última vez que fui en auto a Buenos Aires; en cada cuadra, el último espacio, antes de la esquina, estaba reservado para vehículos de personas con discapacidad. En Santa Fe, el magnánimo municipio, otorga media hora sin cargo, en los estacionamientos medidos. Desde ya que estos estacionamientos están siempre repletos. Les cuento; tenía que hacer un trámite en la radio LT 10. Sobre la derecha no había ningún espacio, pero, sobre la izquierda, había solo 3 ó 4 vehículos estacionados. Al no haber señal de prohibición, ser una calle ancha, y, últimamente, permitir estacionar sobre la izquierda en muchas calles; estacioné mi coche, ya que eran solo unos minutos, e iba a estar en la entrada de la radio; desde donde podía escuchar el silbato, que, según la ordenanza 1017; el inspector debe hacer sonar, dar unos minutos de margen y, luego, hacerlo sonar otra vez. Si no hay respuesta; confeccionar la infracción. (Art. 67 bis). El tema es que no lo hizo, y, unos minutos después, cuando salí, me habían hecho una boleta. Seguramente el silbato, cumple la función de educar, y no se usa porque atenta contra la recaudación, pero, al ser un vehículo de una persona con discapacidad, perfectamente identificado, sería pertinente cumplir con la ley. Hay dos posibilidades; o el inspector es ignorante de sus obligaciones, o la orden del municipio es dar prioridad al dinero, y, en sus valores no existe la inclusión, ni la discapacidad; presentes en el mundo y gran parte del país.

Es lamentable lo que nos toca. Venimos, desde hace seis años, pidiendo que en cada cuadra, haya un espacio para vehículos de discapacitados. No le pedimos que dejen de recaudar; solo un espacio pago, pero reservado para personas con discapacidad.

Paralelamente, los trapitos tienen espacios gratis y sin límite de tiempo.

Ante un reclamo hay, generalmente, una jueza, pero solo se atiene a la normativa recibida: cobrar. Por esta situación, presenté una nota, por la que hay que pagar, al municipio, y al intendente, con fecha 17 de Abril; sin respuesta alguna. El silencio parece ser la respuesta de las autoridades, a los ciudadanos comunes.

Mientras tanto todo bien con la política inclusiva de motos ilegales y bicicletas, que no respetan ninguna norma. Y, en este ítem, nos parece importante que las noticias trágicas de ciclistas y motociclistas, por golpes en el cráneo, informen sobre la tenencia de casco, como una forma de crear conciencia popular, y que los funcionarios, tomen nota.

– – – – – A raíz de la actualización de una posible sanción de la Ley de Humedales, unos programas atrás, invitamos al Dr. Juan José Neiff, investigador del CONICET, magister en Ecología Acuática Continental, doctor en biología y ex director del Centro de Ecología Aplicada. Una autoridad internacional, autor de varios libros y centenares de artículos en todo el mundo, para tratar el tema. Comenzaba la publicidad política, se nos acortó el tiempo, y nos quedamos con ganas de seguir dialogando. Hoy, aparece la noticia de problemas en el mar, por la proliferación de sargazos, y aprovechamos para difundir algo de conocimiento sobre este tema, y unirlo a los humedales y ríos, para que nosotros, habitantes del mundo, tomemos una real conciencia de nuestras acciones antiecológicas que degradan el medioambiente acuático.

Primero, vamos a tratar de saber que es el sargazo.

Sargazo, del latín Sargassum,  es un género de macroalgas planctónicas (Plancton; micro organismos) de la clase Phaeophyceae (algas pardas) en el orden Fucales. Un tipo de algas que pueden crecer varios metros, son pardas o verde negruzcas.

Algunas de estas algas hunden sus raíces en el fondo, pero otras especies han desarrollado unas especies de vejigas y flotan en la superficie libremente. Pueden crecer varios metros y sus tallos se enredan y terminan por formar una red. Una especie de «selva» marina que resulta un peligro no sólo para algunas embarcaciones sino para especies que viven cerca de las costas.

Muchas tienen texturas fibrosas entrelazadas y con cuerpos robustos, pero flexibles, lo que las ayudan a sobrevivir a corrientes fuertes. Por compactación, pueden formar pequeñas islas flotantes.

De acuerdo a su variedad, depende su denominación, ambas derivadas del portugués. En su primera fase, se dice que su nombre proviene de Sargasus (sauce), por sus hojas, parecidas al sauce llorón. La variedad que flota por sus vejigas, parecidas a uvas, de sargasso, que, en portugués, significa uva.

El tema es que el mar de los Zargazos, ubicado en el Atlántico, entre América del Sur y América del Norte, cerca de las islas Bermudas. Es el único mar sin costas, prácticamente no hay vientos y tiene una corriente concéntrica, en el sentido de las agujas del reloj, que han hecho, devenido los tiempos modernos, que también se haya originado una de las cinco islas de basura, flotantes en las que se entremezcla la basura que se produce en el continente, formando barras en el litoral.

De su existencia, ya había dejado constancia, en su cuaderno de bitácora, Cristóbal Colón, pero muchos siglos antes, los fenicios había dado señales de su existencia.

Se le solía llamar en la antigüedad, el mar inmóvil o cementerio de barcos, el mar dentro del océano, un fúnebre lugar de profundas aguas en calma total, sin viento ni corriente alguna. Llamado también la latitud de los caballos, porque los navíos que los transportaban hasta las Américas, detenidos largo tiempo por los sargazos, a veces, las tripulaciones, se veían obligadas a arrojarlos por la borda, ya que consumían gran cantidad de la preciada agua dulce.

El tema, fue siempre una particularidad de la naturaleza, y, siempre estuvo allí, casi inmodificable. Hasta que llegó la modernidad y, ahora, ya une América con Africa.

Los residuos orgánicos de todo tipo se convierten en nutrientes para el sargazo, que crece rápido y se duplica cada 18 días, lo que rebasa el equilibrio ecológico. Una selva de 8.850 kilómetros y 20 millones de toneladas en pleno Atlántico: el sargazo devora un océano borracho de fertilizantes.

Hoy, Science acaba de publicar un estudio que analiza 19 años de observaciones satelitales para descubrir que cada año el Atlántico central produce millones y millones de toneladas de sargazo. Según los datos, este nuevo mar de los sargazos empezó a florecer a partir de 2011, y el verano pasado, el último en estudiarse, cubrió unos 8.850 kilómetros de océano. Esto, según sus estimaciones, son 20 millones de toneladas de biomasa vegetal cada año, y sigue creciendo. Los investigadores creen que la química oceánica debe haber cambiado “para que la floración se produzca tan rápidamente”, probablemente causada por los nutrientes que se filtran en el agua debido a la deforestación generalizada y al uso de fertilizantes.

¿Qué ha pasado desde 2011? Chuanmin Hu, profesor de la Universidad del Sur de Florida y coautor del estudio, explicaba que se debe a una conjunción de motivos, pero que el principal parece ser la reconversión de amplias regiones del Amazonas en campos de cultivo; algo que ha disparado el vertido de fertilizantes al océano, hasta un nivel nunca visto.

Además, el aumento de residuos orgánicos de todo tipo se han convertido en nutrientes que fertilizan el sargazo, lo que da como resultado su rápido crecimiento, al grado de duplicar su biomasa cada 18 días, algo que «rebasa por mucho el equilibrio ecológico», según Brigitta Ine van Tussenbroek, investigadora

Hasta aquí, para tener una idea de los sargazos, pero, como dijo Anaxágoras: “Todo tiene que ver con todo”, y los humedales y ríos también son parte del 75 % del agua que cubre la mayor parte de nuestro planeta, y que el hombre vive contaminando, sin tomar conciencia que, de ella, depende su vida.

Desde el 2013 se está intentando lograr la sanción de la Ley de Humedales que, representan más de 600.000 km². Estos humedales , en nuestra ciudad,  representan el 70% de la superficie total de nuestro municipio.

El art. 124 de la constitución nacional, el 2340 del Código Civil, la ley federal 25675 y la provincial 11717, disponen la protección de los humedales y del medioambiente. Y aquí cabe relacionar los humedales con la biodiversidad, y remarcar, una vez más, el concepto del científico Bradley Cardinale de la universidad de Michigan: “La diversidad de un hábitat natural permite limpiar los contaminantes que se liberan en el medioambiente, por lo que la pérdida de la biodiversidad, podría poner en peligro la capacidad del planeta para limpiar lo que el ser humano ensucia”.

Esperemos que las nuevas autoridades tomen conciencia del compromiso que significa el cuidado de la naturaleza circundante, y actúen con inteligencia para considerarla, y valorarla, como uno de los patrimonios más valiosos de todos los ciudadanos.

Y si los humedales son importantes, imaginen los ríos, que constituyen un mínimo porcentaje del total de agua dulce, del planeta, fácilmente accesible para el ser humano. Hace poco se realizó, en la ciudad de Wuhan, China, el Foro de Grandes Ríos. El lema propuesto, para ser tratado por investigadores de todo el mundo, fue: “Confluencia: civilizaciones y grandes ríos – desarrollo de alta calidad para un futuro sustentable”. Nos produce una gran envidia saber que países evolucionados consideran fundamentales, para la vida actual y futura, la relación entre civilización y cursos de agua dulce ¿Algún día organizaremos un G 20 para proteger nuestros cursos de agua y la biodiversidad?

Nuestro interlocutor Juan José Neiff participó, activamente, ante los máximos poderes que están tratando la sanción de la Ley de Humedales, lo que avala su grado de conocimiento, y reconocimiento, en estos temas, y con el vamos a tratar lo que puede ser la contaminación marítima, convertida en sargazos, la permanente contaminación de ríos y la degradación de los humedales.

Escuchamos Planeta agua, por Ana Belén, y dialogamos con Juan José Neiff